Que Catalunya es un país mucho más complejo y rico en su
diversidad de lo que algunos analistas y estrategas políticos han supuesto, ha
quedado demostrado con el resultado de las urnas de este 25-N.
La estrategia del Sr. Mas y de CiU de capitalizar e
interpretar la masiva manifestación del 11-S, únicamente en clave
independentista y utilizarla como coartada y a modo de plebiscito, para
convocar elecciones anticipadas para mantenerse en el poder a pesar de los recortes,
copagos y euros por receta, y para con
la excusa de la crisis seguir aplicando políticas neoliberales, exactamente
igual que el PP hace en el conjunto del Estado Español, con el objetivo de desmantelar el sistema social
conseguido en estos últimos 30 años, privatizando el máximo posible de
servicios, con el resultado de más
desigualdades sociales en educación, sanidad, precariedad del mercado laboral y
más cargas impositivas sobre los de siempre, sin tocar impuestos como el de
sucesiones, ha resultado absolutamente errónea. No solamente no ha conseguido
la gran mayoría, que según ellos necesitaban para llevarnos a la Tierra Prometida de los
recortes sin fin, sino que ha perdido 12 diputados con respecto a las
elecciones del 2010.
En el programa de TV3 dedicado a las elecciones, ya con
los resultados definitivos, una de las conductoras del programa, le preguntaba
al Sr. Pere Navarro por su derrota, si después de perder 8 diputados se
planteaba la posibilidad de dimitir. Increíble ejercicio de estilo periodístico,
cuando en ningún momento se oyó en la “Nostra” -aunque durante estos últimos
tiempos y sobre todo durante la campaña ha sido la “Seva”- comentar dicha
posibilidad al Sr. Mas después del descalabro sufrido por su partido y él
mismo.
El Sr. Mas, después del golpe recibido y haciendo lo
imposible para sobreponerse, desde el balcón del hotel Majestic, y sin hacer
muy buena cara a los gritos de independencia
de sus seguidores, hablaba del día a día de las dificultades sociales, en fin
de los problemas reales que preocupan a la gran mayoría de catalanes y
catalanas, pero no sonaba creíble, será porque durante toda la campaña
electoral ha ejercido de mago y profeta muy lejos “del poble” al que pretendía representar y al
que parece que no es fácil enredar.
En el conjunto del Baix Llobregat el PSC ha sido la
fuerza más votada y desde aquí conseguiremos que se nos oiga en el resto de
Catalunya y del conjunto del Estado Español. Sin renunciar al derecho a
decidir, creemos que el federalismo es la alternativa más sensata.
Quiero agradecer a todas las personas que con su voto han
apoyado el proyecto socialista, y manifestarles que no nos resignamos a la gran
trampa “de que no hay alternativas” y de la indiferencia “porque no se puede
hacer nada”. Si hay alternativas y si podemos hacer mucho.
No podemos olvidar que por encima de los "mercados"
y partidos políticos están las personas.